Recientemente se han alcanzado grandes logros y progresos en el campo de los test de antígeno, también conocidos como test rápidos, que permiten realizar una evaluación inmediata en pacientes sintomáticos. Al medir la presencia o ausencia de proteínas virales (antígenos), los test de antígeno suelen proporcionar resultados que permiten diagnosticar una infección activa por el SARS-CoV-2 de una manera mucho más rápida que la RT-PCR o pruebas equivalentes.

Aunque los test de antígenos están incluidos en el portfolio del Grupo desde mayo, SYNLAB decidió no aplicar estas pruebas para cribajes masivos u otros análisis de individuos asintomáticos y así continuaremos haciendo. El motivo de esta decisión es que incluso la última generación de test de antígeno tiene una menor sensibilidad que la RT-PCR o las pruebas equivalentes basadas en el ARN y, en consecuencia, es mucho más probable que den resultados falsos negativos en individuos con cantidades menores de carga viral. Esto los hace poco fiables en individuos con un curso asintomático de la enfermedad, en individuos que se encuentren en los primeros días de la infección o trascurridos más de 5 a 7 días después de la aparición de los síntomas.

La decisión de SYNLAB se basa en la descripción de los fabricantes del uso clínico previsto y en la recientemente publicada Guía provisional de la OMS sobre la detección de antígenos. Según esta última, los test de antígeno no deben utilizarse para evaluar a personas sin síntomas, cuando la prevalencia es muy baja, para el cribaje en aeropuertos o fronteras o para el cribaje previo a la donación de sangre.